domingo, 7 de mayo de 2017

El desorden no sostenible

Disorder (Desorden) es la representación gráfica del caos, del fracaso de objetivos, metas y estados.  Es el fracaso de los Estados como nación de gentes, el malestar social de los colectivos con demasiados problemas, los efectos irrecuperables del cambio climático y los actos de quienes lo niegan, las catástrofes naturales inducidasHa sido el tema del premio Pictet que se expone estos días en Barcelona.

Kofi Annan dijo: “Nuestra época se define por el desorden. Nuestro dominio de numerosos aspectos de la vida nos ha llevado a creer erróneamente que hemos sometido el planeta a nuestra voluntad. Sin embargo, la fragilidad de este postulado queda al descubierto cada vez que se produce una pandemia, un terremoto, un tsunami o una sequía. Cada día que pasa, el espejismo del orden salta hecho añicos”.

El premio Prix Pictet busca conseguir que el mundo preste atención a la sostenibilidad a través del impacto de la fotografía en todos sus géneros. Varios de sus mejores autores exponen las obras presentadas al premio 2015 en el Palau Robert de Barcelona.

Las fotografías expuestas, impecables, pictóricas, detallistas, ponen ante los ojos el desorden del mundo en el sentido de lo que está mal, lo que no puede acabar bien, las consecuencias de los actos hechos sin pensar, de las acciones del hombre que sólo calcula el beneficio (o la venganza) en el minuto presente, como si no afectara al día de mañana, como si los culpables fueran siempre impunes, como si las víctimas tuvieran que dar las gracias por seguir vivos.

Son fotografías de todas las partes del mundo, de conflictos, de desastres o de detalles. Son los desórdenes del mundo, el caos que va comiéndose el presente y carcomiendo el pasado.

Sophie Ristelhueber (http://www.sophie-ristelhueber.fr/ ) presenta su serie Once Explosiones, dedicada a las explosiones que dejan cráteres (“tumbas”) en los suelos de Irak varias veces al día. En sus comentarios relaciona estos cráteres con la situación en los diversos lugares de guerra que ha visitado, desde Turkmenistán a Siria, Cisjordania o Irak.


 










Alixandra Fazzina (http://noorimages.com/photographer/fazzina/ ) nacida en Inglaterra, presenta su serie Un millón de chelines, ambientada en el cuerno de África, la guerra, el caos, la violencia, la pobreza, la vida destrozada de la gente que no tiene nada más que minutos de presente. Solo el mar es una vía de escape posible, con más riesgos que certezas. Sus fotos narran el viaje de los desesperados en manos de traficantes hasta los puertos de Somalia. El viaje cuesta 50 dólares, un millón de chelines somalíes.

Gideon Mendel (http://gideonmendel.com/ ) nacido en Sudáfrica, colaborador de National Geographic, presenta sus fotografías bajo el título Un Mundo inundado. Estudia y muestra los efectos del cambio climático desde una perspectiva cercana y comparativa, desde lo que representa una inundación en la India o en Inglaterra, una realidad y a la vez una metáfora de una fuerza arrolladora que entrelaza el destino de las personas entre la inevitabilidad y la solidaridad.

Maxim Dondyuk (http://maximdondyuk.com/ ) nacido en Ucrania, estudia el presente urbano en la serie Cultura de la confrontación. Ucrania, choques, cócteles molotov, manifestaciones a favor de la UE, lucha de las gentes por un futuro mejor. El fotógrafo comenta que “con mucha frecuencia perdí de vista la frontera entre realidad y ficción, me olvidé del espacio, del tiempo y de las causas”.  


















Brent Stirton (http://www.brentstirton.com/ ) nacido en Sudáfrica, ha llamado a su serie La profanación del paraíso. Considera que la naturaleza siempre está en orden, es el hombre el que impone desorden, muerte, caos. Los espacios salvajes del Congo, el primer parque nacional de África, también es el lugar de 11 grupos paramilitares, un ejército rebelde y el oficial congoleño. Y la casa de los orangutanes y rinocerontes.

Pieter Hugo (http://www.pieterhugo.com/ ), nacido en Sudáfrica, titula a su serie Error permanente. Ambientada en un vertedero tecnológico de Ghana, traslada la deshumanización, la desesperanza, la fragilidad, la supervivencia sin esperanza, el otro lado de nuestros aparatos tecnológicos.

La ganadora de esta exposición es Valerie Belin. (http://valeriebelin.com/ )Nació en Boulogne-Billancourt (Francia) en 1964. Ha llamado a su serie Naturaleza Muerta. Son conjuntos de objetos abigarrados con un sentido estético pictórico. No son objetos de gran valor económico o de gran belleza, son baratijas, objetos de usar y tirar, despilfarro de materias primas, vanidades, un consumismo que está exprimiendo y destruyendo al planeta sin prisa y sin pausa.

Valerie Belin












El premio

Prix Pictet es un premio fotográfico creado en Francia en 2008, de periodicidad anual y dotado con 100.000 francos suizos (92.000 €). Se le concede al fotógrafo que haya creado un relato como obra artística excepcional alrededor del tema del año. Detrás están el grupo financiero Pictet & Cie y el periódico Financial Times. Su temática es el desarrollo sostenible, y su presidente de honor, Kofi Annan, que fue secretario general de las naciones Unidas entre 1997 y 2006.

La participación no es libre. Varias personalidades seleccionadas en los campos de las Bellas Artes y los medios de comunicación de todo el mundo deciden el lema del año, que se da a conocer en el Encuentro Fotográfico de Arles, en el espacio de su teatro romano. Después seleccionan a los fotógrafos, a quienes invitan a participar presentando una serie de 10 fotografías. Se da a conocer el ganador a través del Financial Times. En el certamen de 2015, 260 nominadores propusieron más de 700 nombres, de los que quedaron 12 finalistas, de siete nacionalidades. La presentación de las obras se realizó en el Museo de Arte Moderno de París, donde se hizo público el nombre de la ganadora, Valèrie Belin. Con las obras premiadas y las seleccionadas se realiza una gira de exposiciones y se edita un libro.

Los temas escogidos desde el inicio han generado gran impacto: El agua en 2008, ganado por Benoit Aquin con su trabajo sobre la desertificación en China. La Tierra en 2009, ganado por Nadav Kander con su trabajo sobre el impacto generado en el campo y las gentes por los cambios en el curso del rio Yangtsé. En crecimiento, en 2011, premió la obra de Mitch Epstein sobre el caso de EEUU. El poder fue el tema de 2012, y Luc Delahay fue el ganador por su serie sobre el poder político y la fuerza de la naturaleza. El consumo fue abordado en 2014 y ganado por Michael Schmidt. El desorden fue el tema de 2015, y su ganadora fue Valèrie Belin. El premio de 2016 se dedicó al espacio.

Desde 2015 hay un premio específico para Japón. Una fuerte donación anónima impuso la creación de un premio específico que reconociera la participación de Japón como un centro de fotografía mundial. Un jurado independiente, presidido por Fumio Nanjo (director del Museo de Arte Mori), otorga un galardón independiente. Después de estudiar las obras japonesas presentadas a concurso desde su principio en 2008, otorgó el primer galardón a la fotógrafa Tomoko Kikuchi, por su serie El Rio, presentada en 2013, sobre la ingente transformación de las condiciones económicas, sociales y ambientales durante la construcción de la presa de las Tres Gargantas, en China.


La colección Disorder , con imágenes de Ilit Azoulay, Valèrie Belin, Matthew Brandt, Maxim Dondyuk, Alixandra Fazzina, Ori Gersht, John Gossage, Pieter Hugo, Gideon Mendel, Sophie Ristelhueber, Brent Stirton, y Yang Yongliang, está expuesta en el Palau Robert de Barcelona hasta el 28.05.2017. Entrada libre. 

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me gusta. comentario de Eva Mavilop en Facebook.